Macarena Gómez, Nadia de Santiago y Hugo Silva son los protagonistas. |
Me gustan las películas de terror, pero casi siempre salgo decepcionado de la sala de cine. ¡No se alarmen! Pese al título tan cliché - La habitación del mal- con el que renombraron a esta cinta española sus distribuidores en Latinoamérica, Musarañas es una rescatable pieza de terror, drama y thriller psicológico.
¿Por qué cambiarle el título original que describe de manera contundente el carácter de sus personajes? Las musarañas, esos pequeños mamíferos parecidos a los ratones pero que no son roedores, permanecen escondidas en sus madrigueras y algunas son venenosas. Como Montse, el personaje principal, una mujer completamente trastornada.
Años 50. Madrid. Montse vive con su hermana menor en una casona vieja, de esas que infunden miedo. Pero aquí no hay ninguna "habitación del mal" como sugiere el título. La mala es Montse, aunque rece mucho. Pero ella no es mala porque sí. Su oscuro pasado, el recuerdo de su padre, la atormenta.
Producto de sus traumas, Montse se esconde entre las cuatro paredes de la casa, es incapaz de cruzar la puerta y vigila cada paso de su hermana. Un día cualquiera, un vecino toca la puerta pidiendo ayuda y la atormentada Montse decide ayudarlo. Con un extraño en casa, las cosas se saldrán de control...
Producida por Álex de la Iglesia, quien dirigió esos dos clásicos que ya son El día de la bestia (1995) y La comunidad (2000), esta nueva apuesta por el terror se ganó el favor de la crítica y obtuvo tres nominaciones al Goya, incluido el de mejor actriz para Macarena Gómez. Su actuación fue calificada por el crítico de The Hollywood Reporter, Jonathan Holland, como "deliciosamente exagerada". Tal cual.
Grotesca, horripilante y hasta cómica por momentos, Musarañas es absolutamente entretenida y aterra, claro está. Aunque no se aparta de los convencionalismos del cine de horror, su cercanía con el thriller psicológico la hace mucho más interesante y sustanciosa que el promedio de películas "asustadoras" que llenan por llenar las salas de cine.
No quisiera yo que la mal llamada Habitación del mal pasara desapercibida por la cartelera colombiana. Si usted conoce la filmografía de Álex de la Iglesia, si le saca gustillo al cine español o simplemente desea estremecerse de terror o asco, entonces vaya a verla. Déjese convencer por la mirada perturbada de Montse.